Monday, January 12, 2009

Capitulo X - La Traición


Capitulo X

La Traición

…como hielo seco y filoso, sentí la piel de mi espalda como se desgarraba cual espada anónima se servia de mi… Este ya no era mi reino… estos ya no eran mis súbditos… aquellos que cantaban y bailaban en mi nombre me complacían solo para llegar a mi. Cuando desterré a mi antigua reina por traicionarme con un rey aliado, mantuve diplomacia y ambos reinos seguimos diplomáticamente aliados, aun así no creo que crucemos palabras nunca mas. Las mujeres solteras y no solteras que moraban en mi reino comenzaron a acercarse, muchas de ellas amigas de mi antigua reina, muchas trataron de cortejarme pero era tan profundo mi dolor que decidí emplear mi tiempo y mi corazón en otras cosas… Pero con el tiempo llego a mi reina una forastera que llamo mi atención pues era diferente a las demás, costumbres e intereses diferentes. Al tiempo fue presentada en el reino… todos bailaban y sonreían, fiesteaban porque el rey había encontrado su nueva media naranja… No todo era alegría, otras querían a este rey, otros querían a esa reina… Mis pretendientes anónimas no aprobaban mi decisión… el no sentarse junto a mi en el trono y gobernar mi mundo las lleno de ira… Por otro lado, en mis tiempos como caballero, luche contra grandes guerreros… aprendí de los mejores maestros, mis enemigos… enseñe y entrene a muchos otros… En las guerras venideras monte con mis caballeros, en otros momentos mis caballeros defendían el reino sin mi… Ahí fue mi error, muchos de estos caballeros pensaban haber aprendido todo de mi, y aun peor, comenzaron a desear a mi reina y mi reino… Cuando me di cuenta fue muy tarde… en una de esas visitas diplomáticas a otro reino, aquellos en los que había confiado buscaron la manera de hacer el reino suyo… muchos de los que me apoyaban se tornaron en mi contra y los pocos que lucharon por mi fueron asesinados o desterrados... Uno de mis mas leales amigos intercepto mi caravana a medio camino y me advirtió de lo ocurrido en mi contra, pero justo terminando de aquel triste y doloroso mensaje, una flecha ardiendo en fuego traspaso su corazón… Era una emboscada! Varios de los que fueron mis mas leales caballeros, aquellos en los cuales vi talento y entrene y acomode cerca de mi, encabezaban la casería. No me sorprendió ver algunos caballeros de otros reinos, llamados aliados, deseando mi fortuna como rey… deseando mi fortuna como hombre… En un grito de guerra, el fuego de las espadas se cruzaba, los caballeros en mi caravana caían como hojas en otoño… hasta que no pudimos más. …como hielo seco y filoso, sentí la piel de mi espalda como se desgarraba cual espada anónima se servía de mi…

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